Sant Jordi

    La entrada de hoy la publico un poco tarde (me gusta dejarlas programadas para primera hora de la mañana), además tampoco trata mucho sobre el tema de las BJD, sino que habla más bien de la vida cotidiana, y es que hoy, es Sant Jordi.

    Es una de mis fiestas favoritas del año (junto con las navidades), siempre me ha parecido muy bonito pasear por la ciudad y poder encontrarte en cada esquina un tenderete con una pequeña exhibición de libros y rosas. Por no hablar de la leyenda en que tiene el orígen este día. Que vale, que sí, que ahora las princesas son las heroínas de su propia historia, los dragones se han vuelto vegetarionos, animalistas, eco-friendly (y todo lo que se os ocurra) y no van secuestrando doncellas, como mucho quedarán para salir de copas e intercambiar chismes sobre el caballero de turno, al que por cierto se le ha oxidado la armadura y tiene un estilo muy pasado de moda, y sobre la monarquía y el rey que deja a su hija en manos del malote del barrio, mejor ni hablamos. Pero debemos tener en cuenta que la historia tiene cientos de años y que nuestra mentalidad ha cambiado mucho desde entonces (menos mal!). A pesar de todo, no deja de ser un cuento lleno de magia, pensadlo: hay dragones, un héroe salido de ninguna parte y sangre que se transforma (así, porque sí) en una rosa. ¡¿Cómo no me iba a gustar a mí un día así?! Con lo que a mi me gusta todo el rollo fantasy... 

   Que también es otra muy buena excusa para comprarse un libro (o dos, o tres; y si encima te los regalan, mejor).  Además, las tiendas suelen tener algún tipo de descuentos durante el día (veís que bien? Si son todo ventajas). No olvidemos tampoco las múltiples firmas de libros que hay también  programadas en todo lo que es Barcelona. Si tienes suerte, puede que hasta te enteres de que viene a la ciudad el autor de aquél libro que leíste cuando eras una joven y ávida lectora (con la cara llena de granos) y que te marcó profundamente; como me pasó a mi este fin de semana. Pude ir a una conferencia de Phillip Pullman y llevarme firmados esos libros que leí durante mi infancia (vale, no era tan pequeña, pero si digo "durante mi juventud" me siento una vieja, y no, que aún soy joven). Después pude asistir también a la conferencia con Cressida Cowell (para quien no lo sepa: autora de los libros de "Como entrenar a tu dragón") y qué decir de ella... Me enamoró. Tiene una personalidad tan desinhibida y alegre que encandila a cualquiera. Me compré el libro (sí, ese que sale en la foto de arriba con Nerium) por lo maja que era y el buen rollo que desprendía (como diría un amigo: más mona ella). 

    Me he acabado emocionando y enrollandome más de la cuenta, siento todo el tocho, ya acabo no os preocupéis. Bueno, resumiendo. Para mí Sant Jordi es un día mágico, para celebrar la cultura y el cariño que nos tenemos unos a otros. Porque si de algo son sinónimo las rosas es de amor y desde aquí reivindico el hecho de poder regalarlas a cualquiera, mujeres u hombres, da igual. ¿Qué es eso de que solo las chicas reciben rosas? ¡No señor! Todos tenemos derecho a recibir amor.  (Y ya me estoy volviendo a ir del tema). En definitiva. Yo no os puedo regalar ninguna rosa, ni ningún libro (virtualmente es un poco complicado, no?) pero si os dejo un pequeño obsequio aquí abajo. Un punto de libro con Nerium. Quien le apetezca es libre de imprimirlo y usarlo en sus lecturas. (Que ñoña me he puesto con la tontería. Paz y amor para todos :3 )

(PD: El viernes tendréis el resto de la sesión de fotos que le hice)